CONTINÚAN LOS TALLERES DE PREVENCIÓN SOBRE LA VIOLENCIA BASADA EN EL GÉNERO
CONTINÚAN LOS TALLERES DE PREVENCIÓN SOBRE LA VIOLENCIA BASADA EN EL GÉNERO https://i0.wp.com/www.fundacionfrs.es/wp-content/uploads/2024/03/CURRAL-GRANDE-2024-02-25-ALUMNOS6.jpeg?fit=1080%2C721&ssl=1 1080 721 Fundación FRS https://i0.wp.com/www.fundacionfrs.es/wp-content/uploads/2024/03/CURRAL-GRANDE-2024-02-25-ALUMNOS6.jpeg?fit=1080%2C721&ssl=1SENSIBILIZACIÓN CON ALUMNOS Y PROFESORES EN LA ISLA DE FOGO- CABO VERDE.
El gran papel que juegan los centros educativos en la prevención y lucha contra la violencia de género, es un componente primordial que contempla el proyecto que desarrollamos en Cabo Verde, con el que pretendemos que dentro de la comunidad educativa haya profesores formados para trabajar conjuntamente con la red de asistencia a las víctimas, y si surgen casos de violencia de género en el centro, sepan qué procedimientos seguir. Crear consciencia que cuanto antes se informe y sensibilice a los niños y adolescentes sobre esta problemática que azota a muchas familias y a la sociedad en general, serán capaces de identificar casos de violencia de género, tipos de violencia de género y a quién acudir ante una situación de estas.
Tras la gran experiencia vivida durante el mes de enero en 2 institutos de la isla de Santo Antão, el equipo del proyecto compuesto por Victoria Seoane – coordinadora de FRS en el pais. Beltrond de Barros – técnico local de Fogo y Anildo Spinola – responsable de comunicación de la empresa SA Multimedia (servicio técnico del proyecto), se trasladó entre los días 29 de enero y 2 de febrero a la Isla de Fogo para formaciones con alumnos y profesores en tres escuelas secundarias del municipio de São Filipe: el instituto Dr. Teixeira de Sousa, el instituto Curral Grande y el instituto Pedro Verona Pires. Todas las dinámicas realizadas, tanto con profesores como con alumnos, tuvieron una hora y treinta minutos de duración.
En la mañana del 29 de enero, se llevó a cabo una sesión de formación con los profesores del Instituto de Curral Grande en la que participaron 7 profesores. La formación comenzó con la presentación del proyecto y continuó con la explicación de la legislación sobre la violencia de género en Cabo Verde.
Tras esta primera parte más teórica, avanzamos a una puesta en común e intercambio de experiencias sobre el papel de la escuela en casos de violencia de género y abuso sexual. Los profesores compartieron que a veces era complicado hacer su papel en la prevención y sensibilización, e incluso actuar ante algún caso ya que la realidad de muchos alumnos es la contraria en sus casas. Por ello, pidieron al proyecto una nueva jornada de prevención y sensibilización en la que estuviesen presentes los profesores, alumnos y padres con el fin de que el mensaje llegue a las familias y haya un trabajo conjunto entre escuela y casa.
Por la tarde, la sesión de formación se realizó con 32 profesores del Instituto Pedro Verona Pires con los que se abordaron los mismos temas y donde se compartiendo experiencias y encontrando soluciones a posibles casos de violencia en la escuela, dio como resultado una puesta en común muy participativa, con algunos profesores relatando casos de los que habían sido testigos.
En la jornada del 30 de enero, la dinámica se realizó con los profesores en el Instituto Dr. Teixeira de Sousa a la que asistieron 8 profesores. El grupo fue el más participativo, enganchado y abierto: se intercambiaron experiencias y dieron sugerencias de cómo hacer cuando se conoce un caso en el instituto. Uno de los testimonios más interesantes fue el miedo que muchos profesores sienten ante seguir el proceso legal de denunciar cuando conocen un caso ya que las instituciones responsables a veces no siguen el sigilo profesional y el agresor acaba sabiendo quién fue la persona denunciante, lo que pone en peligro en este caso al profesor.
Por la tarde, se realizaron dos dinámicas con alumnos en el Instituto Curral Grande. La primera dinámica fue con alumnos de 7º año de escolaridad (1º de la ESO) en la que participaron 69 alumnos muy entusiasmados y participativos. En la segunda dinámica participaron 56 alumnos de 8º año de escolaridad (2º de la ESO) que se mostraron muy interesados en conocer qué deben hacer cuando saben que alguien sufre violencia de género. Con ambos grupos trabajamos la dinámica del “Semáforo de la violencia” en la que los alumnos por grupos clasificaban en cartulinas de color verde, amarillo y rojo una situación de pareja según la gravedad de lo descrito.
El 31 de enero se visitó el Instituto Dr. Teixeira de Sousa. Por la mañana, la sesión se realizó con 24 alumnos de 12º año de escolaridad (2º de Bachillerato) con los que reflexionamos sobre las causas profundas de la violencia de género poniendo el foco en la cultura machista y cerrada que vive el país, especialmente en la isla de Fogo.
Para materializar lo trabajado por medio de preguntas y reflexiones se realizó la dinámica “role-play” enfocada en las diferentes masculinidades y la reacción de la mujer ante ellas. Así, pedimos cuatro voluntarios y cuatro voluntarias: las cuatro chicas salieron del aula mientras se explicaba a la clase y a los cuatro voluntarios lo que iba a suceder. Las cuatro masculinidades que cada alumno debería interpretar (“el cuñado” que solo tiene actitudes machistas y graciosas con faltas de respeto camufladas; “el bollito”, que es muy atractivo físicamente, tiene labia y le dice a las mujeres lo que sabe que quieren oír; “el invisible”, que es tímido, respetuoso, pasa desapercibido y normalmente las mujeres solo ven como amigo, y “el increíble”, que tiene autoestima y autoconfianza, tiene valores igualitarios y es atrayente) tienen que intentar conquistar a las cuatro chicas.
Tras el “role-play” se reflexionó en grupo pequeño y grupo grande cuestiones como: ¿qué actitudes gustaron más y cuales menos?; ¿coincide la respuesta con lo que habríamos escogido en una situación real? Etc.
Por la tarde, se realizó la misma dinámica con una clase de alumnos de 9º año de escolaridad (3º de la ESO) y 2 clases de alumnos de 10º año de escolaridad (4º de la ESO) que hacían un total de 58 alumnos. Fue una dinámica excepcional ya que este grupo de alumnos estaba realmente disfrutando de la actividad, muy involucrados y con grandes dotes de improvisación y creatividad para representar las situaciones dando el máximo. Muchas de las alumnas, en el espacio de reflexión final sobre la actividad, compartieron que con la sesión aprendieron que cosas que daban por normales (que sus novios controlasen sus teléfonos, que sus novios les prohibiesen vestir x ropas etc.) no lo son y demostraron intención real de cambiar sus actitudes machistas siendo más consciente de los derechos y valía que tienen como mujeres.
Finalmente, el 1 de febrero en el Instituto Pedro Verona Pires se realizamos dinámicas con un total de 405 alumnos. Por la mañana dos sesiones, la primera con 131 alumnos de 8º año de escolaridad (2º de la ESO) y la segunda con 117 alumnos de 11º año de escolaridad (1º de Bachillerato). Con ellos hicimos la dinámica de las masculinidades pues tras las experiencias anteriores en los otros institutos consideramos que era la dinámica con mayor impacto.
No obstante, cabe decir que tener en una misma sesión a un número tan elevado de alumnos complica que el mensaje llegue con la misma potencia, claridad e intensidad. Por la tarde, en la que las dinámicas fueron mejor recibidas y más productivas, la primera sesión fue con 83 alumnos de 9º año de escolaridad (3º de la ESO) y la segunda sesión con 74 alumnos de 10º año de escolaridad (4º de la ESO) que realizaron las dinámicas de manera participativa y creativa.
Tras estos cuatro días intensos de sensibilización y prevención, conseguimos llegar a un total de 47 profesores de Educación Secundaria y a un total de 612 alumnos de entre 1º de la ESO y 2º de Bachillerato que nos ha permitido continuar constatando que es vital para el fin de esta problemática encontrarnos con alumnos y profesores para reflexionar, compartir conocimientos y experimentar por medio de ejemplos y teatro algunas de las problemáticas que muchos de ellos viven y conocen en sus casas, colegios o calles.